Morón de la Frontera, es un municipio perteneciente a la provincia andaluza de Sevilla, al sur de España. A una altitud de 297 metros al nivel del mar y con un termino de 431,94 km/2. Los orígenes se remontan a la prehistoria, encontrándose dólmenes de la era paleolítica, conocidos como el dolmen de El Acebuche, el dolmen de la Párraga, El Hoyo del Gigante y Carda chapines.
El
castillo de Móron esta enclavado en un cerro en pleno casco urbano y
es uno de los 5 castillos que compone la “Ruta de los Castillos,
Testigos de la Reconquista”. Con impronta de tartesos y romanos,
son los musulmanes lo que refuerzan los restos romanos y visigodos
que quedaban, los restos del castillo lo datan del siglo XI. Morón
se transmuta al reino de Caifa, que es cuando el castillo coge su
mayor importancia.
Fue
conquistada el 22 de julio de 1240 por las tropas castellanas a mano
de Fernando III “El Santo”, permitiendo a muchas familias
musulmanas del lugar permanecer como mudéjares dedicándose
principalmente a la agricultura y a oficios manuales. Durante la
conquista del castillo se cuenta una leyenda, cuenta
“Durante
la toma del castillo el caballo de Adalid se desbocó, tras ser
derrotado éste por el infanzón Rodríguez Gallitano, y al quedar
libre de su amo, se dirigió a la puerta principal del castillo, por
la que lo abrieron los moros. Los de Fernando III aprovecharon el
momento para penetrar en él y derrocar a la fuerza de intramuros.”
Debido a su ortografía lo hacia un emplazamiento militar estratégico
y su situación en la banda morisca, de hay que le añadieran “de
la Frontera”,
donde la reconquista se alargo hasta finales del siglo XV.
En
1253 Alfonso X “el
Sabio” cedió
el castillo y la villa a la ciudad de Sevilla.... En su día devio de
ser una fortaleza-palacio de mucha belleza, pero durante un tiempo en
el siglo XVIII estuvo abandonado y sufrió saqueos. A principios de
1810 fue ocupada por las tropas de Napoleón reforzandola, para
posteriormente en su huida mando dinamitar el castillo llevándose la
peor parte las murallas y torres que las componía dejándolo en un
lamentable estado.
El
inventario del castillo es de una primera línea de murallas con unas
torres cuadradas y macizas, equidistantes para dificultar el acceso.
En el interior del recinto se encuentra el edificio principal
llamada Torre
Gorda,
en la zona central superando en tamaño al resto del complejo y dos
de sus lados tenía fijados estancias menores.
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