sábado, 18 de diciembre de 2021

CASA RÚA - VILLA APOLO

 

A las afueras de Ronda, en el camino de la Virgen de la Cabeza se encuentra los restos de la Villa Apolo, siendo conocida por la mayoría de los rondeños como "Casa Rúa".

A principios del siglo XX, el Maestro de obras Rúa comenzó las obras de esta casa de veraneo. En un principio no iba a contar con la pista de tenis y la piscina que finalmente se hizo y que terminaron siendo los símbolos de aquella de aquella hermosa construcción, cuando en aquella época era todo un lujo tener una casa de esas características, además fue la primera casa de campo de Ronda en tener electricidad. 

Con un diseño acertado, con una entrada señorial y con una distribución que contaba con todas las comodidades, teniendo en cuenta en la época en la que se construyó. El proyecto de construcción albergaba otras dos casas que no se llegó a construir. En el año 1914 se terminaron las obras.


El fotógrafo Miguel Martín plasmo con su cámara de fotos la casa en su máximo esplendor.


En los años 50 la casa cambió de propietario. Fue Don José Hens de origen austriaco y afamado médico procedente de Córdoba y su esposa Doña Apolonia Tienda, y de hay pasó a llamarse "Villa Apolo". Ellos fueron lo que posteriormente construyeron la pista de tenis y la piscina.
Según cuentan algunas personas que los conocieron decían que tenían varios hijos con grandes dotes para cantar y tocar instrumentos musicales. De hecho en la casa llegaron a tener dos pianos, imagen que se quedaba grabados en la mente de los rondeños que por allí pasaron.
Desde un principio la casa contaba con un sistema bastante rudimentario para abastecerse de agua, a pesar de tener esa imagen de mansión. El pozo del que se extraía el agua se encontraba en la torre que hay próxima a la vivienda junto a la cornisa. Mediante el desnivel el agua llegaba a un pozo, que estaba protegido con una reja para que nadie pudiera caer a su interior. Mediante una bomba eléctrica el agua era conducida a un gran deposito que estaba en la azotea para que se almacenara y posteriormente se distribuyera por toda la vivienda. Sobre la mencionada piscina la recuerdan que era bastante moderna moderna para la época, y las pista de tenis de cemento.
El abastecimiento de la electricidad desde el Barrio de San Francisco. Comenzaba de un poste de madera que se encontraba al comienzo del camino de Los Molinos que desciende hasta la central eléctrica. Dicho tendido eléctrico iba desde el Barrio de San Francisco hasta la Villa Apolo mediante varios postes.
Según cuenta, se celebraban bodas, comuniones y fiestas de sociedad. Contaba con una capilla en la parte baja de la casa que se entraba por el jardín. En verano de cada año venía un sacerdote francés y oficiaba la misa en latín. En dicha planta baja también se encontraba las estancias del personal de servicio, dichas estancias no se comunicaba con la vivienda principal.
La entrada principal, que se accede por una escalera, se llega una estancia con una hermosa cristalera.
Su último propietario, Don José María Sánchez Robles y Tarín, hizo unos cambios en la década de los 80. Siendo su proyecto un hotel de lujo con una zona residencial, que es cuando dio comienzo los litigios con el Ayuntamiento de Ronda y/o la Junta de Andalucía.







La torre que se encuentra junto a la cornisa fue construida por los franceses cuando ocuparon Ronda en la Guerra de Independencia. Su función es de torre vigía, principalmente controlar desde la distancia el paso por el Puente Nuevo. Por tanto tiene un valor histórico. Finalmente se utilizo como torreta de electricidad.






Dicho emplazamiento también cuenta con una leyenda negra de finales del siglo XX. Cuenta que en la anterior familia, la familia Rúa, contrataba los servicios de varias niñeras para el cuidado de sus hijos. Pero para la desgracia de la familia, un día se perdió una de sus hijas que no llegaban a encontrar a pesar de todos los esfuerzos que las autoridades pusieron. En una de esas noches los padres no encontraban a una de las niñeras en la casa y comenzaron la búsqueda en el entorno de la casa y no fue hasta que llegaron a la torre donde se encontraron con un macabro escenario, a su hija desaparecida descuartizada en un barreño y empapada en su propia sangre, entrando en estado de shock por tan dramático escenario, ni la policía ni los detectives que habían contratado no pudieron resolver el crimen. Ni con el asesino, ni con la niñera. Por tan terrible perdida de manera tan rocambolesca. Se cuenta que en ocasiones se ve a una niña merodear por la zona a la que se le escucha pedir venganza.

Toda leyenda tiene un comienzo en un hecho real, pero con el tiempo se suele distorsionar y, lamentablemente los hay que añaden residuos a la historia.

Hoy en día, y desde hace ya bastante décadas que se encuentra en un estado ruinoso y de hace pocos años han puesto una verja en la entrada para evitar la entrada.








domingo, 5 de septiembre de 2021

CERRO MALAS CAMAS - CERRO LAS CHAPAS

 

-Hay algo, en la austera presencia del paisaje español que hiere el alma con un sentimiento cercano a lo sublime.

Washington Irving




Localidad de referencia: Canillas de Albaida (Málaga)

Entorno: Parque Natural Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama

Trazado: Circular

Distancia: 23 km

Dificultad: Media – Alta

Duración: 8-9 horas, según paradas y ritmo de marcha.

Altura máxima: 1.818 metros

Altura mínima: 1.194 metros



Ruta realizada el 3 de abril del año 2021 guiado magistralmente por mi gran amigo y hermano del alma Juani “el Comandante” por su mucha experiencia en la montaña labrada durante poco más de dos décadas, lejos de ser poco. Ruta realizada por algunos compañeros del Club de Comando Preston por un conjunto de sierras rocosas llenas de impresionantes picos y tajos rocosos.

Para llegar al inicio de dicha ruta, inicio y final, pues su trazado es circular, hay que hacerlo desde la localidad malagueña de Canillas de Albaida y de hay tener de referencia la pista asfaltada que lleva a la “Fábrica de la Luz” y la cantera, que llegado a un punto en el que hace una curva a la izquierda, se debe seguir recto por una pista terriza e la que es muy aconsejable hacerlo con un vehículo 4x4 o un todo camino y no con un turismo, pues hay tramos de pista en lo que rozarían los bajos del coche. Son entre 10-11 km los que hay que recorrer hasta llegar al inicio de ruta en una bifurcación junto a un corta fuego, el que vemos una vez que dejamos atrás el Arroyo de la Cueva del Melero.



Empezamos a caminar por pista que va en ascenso a nuestra derecha donde al paso nos sale una alberca y un gigantesco nogal despojados de sus hojas por el invierno dando al arbusto una apariencia esquelética. Llegamos al Puerto de la Orza, y posteriormente por la Cuerda del Nevazo hasta llegar al Cerro Albucaz (1.726 m) por el Collado de los Carneros con la Maroma al fondo y a tiro de piedra el Cerro de Malas Camas (1.786 m) y su cresta, nuestro primer objetivo.













Una vez llegado al punto geodésico, al que lo tenemos a nuestra izquierda una vez llegado arriba, descendemos por su cómoda cresta hasta llegar a otro puerto donde enlazamos a una pista dirección al impresionante Cortijo del Haza del Aguadero, mayormente en descuido a excepción de una estancia que se le sigue dando uso. Ascendemos por una cómoda pista para llegar de segunda al Puerto de la Orza y de hay dirigirnos al Cerro de las Chapas en un tramo lineal de la ruta, pero con una parada para el almuerzo.


Retomamos la marcha hasta llegar al Cerro del la Chapa, donde supongo que el nombre le viene por una modesta edificación de chapa pintada en verde en la cima, y que próxima a ella, en un cerro algo más bajo hay un vértice geodésico con impresionantes vistas, entre ellas el Pico Lucero.

















En el libro de “Sierras Tejada y Almijara. Guía del Excursionista”, de la Editorial La Serranía, escrito por mi mentor y gran amigo y mucho mejor persona, comenta como otro amigo suyo, gran conocedor de dicha sierra le relata un episodio ocurrido con la guerrilla antifranquista:


En la tarde del 19 de septiembre de 1945, un grupo formado por diez guardia civiles y diez soldados regulares hicieron una emboscada a un grupo de siete guerrilleros. Estos guerrilleros de un grupo de diez que ganó las costas españolas entre Granada y Almería en una lancha procedente de Orán. Tres de ellos murieron en la playa mientras el resto fue cercado en este lugar después de ser delatados por un pastor que trabajaba en el cortijo Cerezal Alto. Tras varias horas de duro enfrentamiento, seis de los guerrilleros encontraron la muerte y el otro escapó uniéndose posteriormente al grupo de Ramón Vías, otro célebre jefe guerrillero precursor de la guerrilla en las sierras Tejeda y Almijara”.








Después de recrearnos con las vistas volvemos para recuperar por la pista que nos llevaba a la base del Cerro de Las Chapas, hasta llegar a un collado y de hay coger por otro tramo que nos lleva al Puerto de Cómpeta, cercano a una cantera de mármol abandonada, pues fue una cantera ilegal, y en breve llegamos a la pista, que tras recorrer aproximadamente tres kilómetros llegamos a los coches. Es la misma pista terriza por la que pasamos con los vehículos antes y por la que pasamos de vuelta.